viernes, 6 de mayo de 2011

POLLO CON PIÑA

INGREDIENTES:
1 kilo de pollo, ají colorado, comino, sal,  pimienta, ajinamoto, ajos ,vinagre, sibarita, piña en rodajas.
PREPARACION:
Curtir las presas de pollo con los condimentos antes mencionado. Cortar las piñas en rodaja y ponerlas a hervir en agua mas o menos 5 minutos un dedo de agua, luego escurrir. Volver a cocinar un  poco de agua, menos de un dedo y agregar una cucharada de azúcar, poner la olla al fuego. Agregar aceite a la presas de pollo, con el curtido y se tapa la olla. Luego agregar las piñas al pollo , se remueve y se sirve.


viernes, 29 de abril de 2011





EL ORIGEN DE LA PIÑA
Su origen se remonta en forma muy primitiva en Brasil y Paraguay. Todas estas especies son nativas de la cuenca amazónica, y fue dentro de esta vasta región donde indudablemente se domesticó la piña. Se han señalado como el área de origen la cuenca superior del Panamá, entre Brasil, Paraguay y Argentina, las selvas del curso superior de la amazona, y las regiones semisecas de Brasil, Venezuela y Guyana.

La producción a nivel mundial se inició desde 1500 cuando se propagó por Europa y se distribuyó en las regiones tropicales del resto del mundo. La variedad más famosa es la Cayena lisa (Smooth Cayenne) la cual fue introducida a Europa por la Guyana francesa. La forma de consumir la piña procesada (enlatada) se inició en Hawaii al final de 1800 y permitió el desarrollo industrial de esta fruta.  Tailandia, Filipinas, Brasil y China son los principales productores de piña con cerca del 50 % de la producción mundial. La India junto con Nigeria, Kenya, Indonesia, México y Costa Rica son los países restantes que producen las mayores cosechas de piña (50 %).

Principales países productores de piña Fuente: FAO 2006
Su origen se remonta al siglo XVI cuando Juan Léry la descubrió en Brasil, posteriormente pasó a Inglaterra y no fue hasta en tiempos de Luis XV, cuando se cultivó por primera vez en Francia, donde se la veía en los grandes jardines reales y en las mesas de algunos grandes señores. Para los europeos, la piña era sinónimo de perfección, finura, exquisitez y fue el símbolo exclusivo de la hospitalidad de la nobleza.

Por error se le llamo piña pero su verdadero nombre era ananás, que en el lenguaje guaraní y en su sitio de origen significa “fruta exquisita”. Para los pueblos precolombinos fue parte importante de su alimentación, y la cultivaban cuidadosamente en hileras de sus jardines y además la valoraban por sus poderes medicinales.


Calorías
Esta fruta proporciona diferentes niveles de calorías según se tome al natural (5º por cada 100 g), en conserva (70 por cada 100 g) o en zumo (45 por cada 100 g).
Vitaminas
Son muy importantes sus valores dietéticos y medicinales por su alto contenido en vitamina C, así como vitamina B1 o tiamina, favoreciendo de esta manera el desarrollo y el buen funcionamiento de los músculos y el sistema nervioso. En ciertas variedades, también destaca el contenido en vitamina A. La piña es además una rica fuente de azúcar, calcio, sales y celulosa y contiene cantidades pequeñas de magnesio y potasio.
Propiedades
Tomada en forma de zumo tiene efectos desintoxicantes y es ligeramente diurética. No obstante, también conviene comerla entera para aprovechar su contenido en fibra. 

Usos culinarios 

La piña no solo es utilizada como postre sino que  tiene diversos usos culinarios. Con ella se pueden preparar acompañamientos para todo tipo de carnes y pescados ya que su sabor agridulce es una combinación excelente para crear platos diversos. Excelente para acompañar jamones, cerdo y pavo, o para  preparar deliciosas ensaladas. Una sencilla pero fresca ensalada es la elaborada con trozos pequeños de esta fruta mezclándolo con rodajas de palmitos, queso blanco  cremoso o simplemente crema de leche aderezado con bastante pimienta y apenas algo de sal así como también es exquisita su combinación con ensalada de camarones. A la hora de hacer una barbacoa, se pueden acomodar rodajas y cocinarlas al mismo tiempo que se cocinan las carnes, lejos del fuego fuerte con apenas azúcar y una vez  doradas y tiernas servirlas como postre con una bocha de helado de crema americana. Esto mismo se puede hacer en una sartén de teflón con algo de manteca,  azúcar y flambearlo con un perfumado Ron, aunque fresca en rodajas o en cubos es refrescante para consumirla a modo de postre en verano. 

Es importante destacar que debido a una enzima presente en el ananá llamada bromelina no se puede agregar la fruta cruda al hacer un postre con gelatina ya que jamás coagularía, sino que se le debe dar una cocción previa. Esta misma enzima es la que la convierte en un excelente ablandador de carnes.  

Al comprar una piña, la misma debe estar madura y sin magulladuras, que sus hojas tengan un color verde oscuro y que si se le da un fuerte tirón a una de sus hojas éstas se desprendan fácilmente. Otro de los indicadores de madurez es el aroma dulce e intenso especialmente en la base del fruto. Para prepararlo, el primer paso es cortar la parte superior donde se encuentran las hojas y la parte inferior para crear una base para poder trabajar más cómodamente. Luego con un cuchillo filoso, separar la piel de la carne en dirección vertical. Luego cortar en anillos y quitar el centro de cada uno. Para conservarlo intacto se recomienda hacerlo en el refrigerador una vez cortado.

Consejos:

Para reconocer si una piña está en su punto, es decir madura, dulce y jugosa, debes fijarte en la consistencia de la piel: debe ser firme al ejercer presión con la mano. El penacho debe ser erguido, el color de la carne, uniforme, y el aroma, ligero y delicado. Ve con cuidado con aquella fruta que presente manchas oscuras o partes blandas, ya que puede estar muy pasada.La piña se conserva en buenas condiciones de tres a cuatro días y es fácil de congelar en almíbar o en puré. De esta manera puede durar hasta doce meses. También se puede comer fresca, en conserva con almíbar, en sorbete, en macedonia y también en zumo. Puede servirse como aperitivo, acompañada de trocitos de jamón, queso, bacón, etc. Queda muy bien emparrillada, forma parte de numerosos pasteles y tartas y de caza y asados de carne. Para poner esta fruta a punto hay que retirar el corazón, la piel y los ojos que aparecen al borde de la carne. Si se vacía con cuidado, puedes utilizar la cáscara para servir las macedonias, los sorbetes y las ensaladas.